Las claves de cómo y cuándo cepillarse los dientes

¿Por qué no es recomendable cepillarse los dientes justo después de comer?

Limpiarse la boca justo después de haber ingerido alimentos puede ser un hábito contraproducente.

El cepillado de dientes es básico para mantener una correcta higiene bucodental y disminuir el riesgo de sufrir caries, gingivitis, etc. Sin embargo, existen ciertos hábitos que repetimos durante el proceso de limpieza de los dientes y que no los realizamos de forma correcta.

Uno de los errores más habituales es cepillarnos los dientes justo después de comer. Aunque pueda sorprender, limpiarse la boca justo después de haber ingerido alimentos puede ser un hábito contraproducente. Es mejor esperar media hora al menos antes del lavado. La explicación es sencilla:

Cuando ingerimos cualquier alimento o bebida, inmediatamente se modifica el pH de nuestra boca aumentando la acidez. Si nos cepillamos en ese momento, esparcimos este ácido a nuestro esmalte, que viene a ser como el escudo protector de los dientes. De esta forma lo que fomentamos es la erosión del esmalte.

Además de esperar un rato antes de lavarnos los dientes, hay otros hábitos recomendables para restablecer el pH de nuestra boca, como puede ser enjuagarnos con un vaso de agua o masticar chicle sin azúcar. De este modo, favoreceremos la producción de saliva y ayudaremos a restaurar el nivel de pH adecuado.

También es conveniente no mojar el cepillo antes de lavarnos los dientes, ya que si éste está seco se arrastra mejor la suciedad y se eliminan mejor los restos de alimentos. Además, tampoco es recomendable poner demasiada pasta, ya que un exceso de espuma no ayuda a un correcto cepillado. Por último, es mejor no enjuagarse demasiado para dejar actuar el dentífrico y que el flúor fortalezca el esmalte o la clorhexidina lo haga con las encías.

Estos consejos son especialmente recomendables en el caso de cepillado nocturno, el más importante del día cabe destacar, por la acumulación de bacterias y restos de alimentos acumulados a lo largo de toda la jornada.

¡Ya sabes! Con estos consejos no hay excusas para hacerlo mal.