¿El chocolate previene la caries?

Lo que nunca hubieras imaginado del chocolate es que puede prevenir la caries, pero, así es

Un estudio realizado por la Universidad de Osaka lo corrobora, según sus responsables, el chocolate posee un componente antibacteriano en la corteza del cacao, que protege nuestros dientes de la formación de caries.

La caries se produce cuando la bacteria Streptococcus mutans produce una molécula viscosa, el glucano, que facilita su anclaje en la pieza dental. La semilla del cacao posee una sustancia llamada teobromina, bactericida que compensa los altos niveles de azúcar del chocolate, e impide la formación de ésta molécula viscosa. En la vaina de la semilla del cacao, que a menudo se desecha, aún hay más cantidad de este bactericida, por lo que se podría utilizar como componente de la pasta de dientes.

Por supuesto, conviene decantarse por los de mayor pureza, es decir, aquellos que contengan más del 70% o el 80% de cacao. De lo contrario, nos exponemos a una mayor cantidad de azúcar en la mezcla. No obstante, los dentistas creen que para evitar la placa dental vale más observar una correcta higiene que atracarse de chocolate.

En EEUU ya se comercializa pasta dentífrica con cacao, de hecho, podemos incluso prepararla nosotros en casa. De esta manera, no solo combatiremos las caries, sino que beneficiaremos nuestra boca y dientes con los taninos, polifenoles, flavonoides -característicos del cacao- y la ya citada teobromina, que endurece el esmalte.

Ingredientes:

• 2 cucharadas de cacao en polvo
• 2 cucharadas de bicarbonato de sodio
• 4 cucharadas de aceite de coco
• 6 gotas de aceite de naranja, menta o hierbabuena

Mezclamos todos los ingredientes hasta obtener una masa homogénea y lo guardamos en un tarro de vidrio. En cuanto al uso, podemos emplearlo de la misma manera que un dentífrico convencional.)

A estas alturas, seguramente, el hecho de que el chocolate sea un alimento que previene las caries deja a más de uno patidifuso y bastante contento con la noticia. Desde luego, este hecho elimina, de momento, el mito de que el chocolate es perjudicial para nuestros dientes.